En medio de la creciente ola de vehículos eléctricos que barre España, nos enfrentamos a una realidad desafiante: la infraestructura de recarga de vehículos eléctricos. Aunque se han logrado avances significativos, es imperativo destacar que, lamentablemente, estos avances no son suficientes, especialmente en la instalación de cargadores de alta potencia. Algunos factores reveladores nos invitan a reflexionar sobre los desafíos que aún persisten.
La Realidad de la Infraestructura de Recarga de Vehículos Eléctricos en España
La Asociación Española para el Desarrollo e Impulso del Vehículo Eléctrico (AEDIVE) informa que a día de hoy España cuenta con 30.350 puntos de recarga operativos, de un total de 37.350. Sin embargo, la realidad de la infraestructura de recarga de vehículos eléctricos en España es muy distinta, este panorama revela que aproximadamente el 19% de los puntos de carga pública se encuentran fuera de servicio, ya sea por finalización de instalación o mantenimiento. Una problemática común es la falta de capacidad en la red eléctrica, lo que retrasa la implementación de cargadores de alta potencia.
Según el informe de AEDIVE, al finalizar el año 2023, el parque automotor eléctrico en España alcanzó la cifra de 269.803 vehículos totalmente eléctricos. Además, la red de cargadores fijos de uso público ascendió a 34.049, estableciendo un ratio de 7,92 vehículos eléctricos por punto de recarga público (BEV por punto de recarga). Aunque esta proporción no es desfavorable, el verdadero desafío radica en la baja utilización de estos puntos de recarga.
La baja utilización de los puntos de recarga públicos en España se atribuye a diversos factores cruciales que es necesario comprender. Estas razones proporcionan una visión más clara de por qué los usuarios de vehículos eléctricos muestran una preferencia por otras alternativas. Aquí destacamos dos motivos fundamentales:
Potencia de carga
Menos del 8% de los puntos de carga pública en España supera los 50 kW de potencia. Esta limitación implica que la velocidad de recarga es insuficiente para muchos usuarios, especialmente aquellos que buscan una carga rápida y eficiente, crucial para viajes largos. La necesidad de potencia superior es evidente, ya que la mayoría de los usuarios de vehículos eléctricos buscan minimizar el tiempo de espera durante la recarga.
La mayoría de los usuarios cuentan con cargador privado
Alrededor del 80% de los usuarios de vehículos eléctricos en España cuentan con un cargador en casa. Este hecho sugiere que la carga doméstica satisface sus necesidades diarias, lo que disminuye la dependencia de los puntos de recarga públicos de baja potencia. Además, estos usuarios están más enfocados en la recarga rápida en carretera, donde el tiempo de espera se vuelve crucial. La preferencia por cargadores que superen los 50 kW se convierte en un factor determinante sobre todo para satisfacer las demandas de los conductores de vehículos eléctricos en situaciones de viaje.
Al entender estos motivos, se destaca la importancia de mejorar la infraestructura de recarga pública, no sólo en términos de cantidad, sino también en la calidad y velocidad de los cargadores disponibles. Esto no solo abordará las limitaciones actuales sino que también impulsará la adopción masiva de vehículos eléctricos al hacer que la recarga sea más accesible, rápida y eficiente para todos los usuarios.
por Thomas X. Pietrini
La Realidad de la Infraestructura de Recarga de Vehículos Eléctricos en España
